Entrando por la carretera procedente de Arcos de la Llana vamos divisando el perfil de la Iglesia de San Cosme y San Damián y preparando el itinerario para realizar el PASEO POR VILLANGÓMEZ
Aparte de la pintura, los murales se fusionan con la literatura de algunos novelistas contemporáneos y con la tecnología que nos proporcionan los códigos QR para ir obteniendo una información mas detallada de cada creación.
"AL BORDE DEL SENDERO" nos muestra el tranquilo y sosegado paso del tiempo
para combinar y componer una maravillosa estampa entre la ficción y la realidad,
alcanzando el alargado mural donde se representa "LA SIEGA", cuatro estupendos fotogramas
en el que tanto el hombre como la mujer colaboran en las tareas de la cosecha del cereal
para la posterior recogida y acopio del grano
en este arduo y laborioso proceso que supone la recolección.
La placidez de "UN PERRO" desperezándose se dibuja en los lienzos y fachadas que el Ayuntamiento y propietarios de la localidad ponen a disposición
para poder quedar grabados mensajes como "CUALQUIER DÍA SIN ESPERANZAS SIN DESESPERACIÓN"
o evocarnos la literatura Quijotesca en sus duelos con los molinos de viento.
El entramado urbano acoge diversos cuadros intercalados entre las viviendas mas recientes y las mas antigüas,
alcanzando la Calle Quintanilla para ayudar a desatar a la protagonista de "LOS VIAJES DE GULLIVER"
y descubrir el flirteo entre "LA MÚSICA Y LA LITERATURA".
Nos podemos sentar despreocupados en los bancos de forja recién salidos de la fragua
para escuchar y adivinar las diferentes tonalidades de "EL MAR, LA MAR"
que contrastan con el delicado equilibrio de los húmedos y bellos tulipanes
dispuestos en avanzadilla frente a la vetusta hilera de centenarias edificaciones.
Con el paso del tiempo, el adobe va ganando terreno a la pintura en la que el rostro de "KIKO VENENO" se diluye y se disuelve a espaldas
de los trinos que se pierden entre la frescura de los árboles y los acordes de una guitarra.
La sencillez y austeridad de la Calle de la Alameda
nos lleva al enfrentamiento, cuerpo a cuerpo, con el súper héroe "BATMAN"
y a la delicadeza amorosa que muestran "APOLO Y CALÍOPE" en una aptitud repleta de sensibilidad.
La profundidad de las numerosas bodegas de Villangómez desprenden y emiten
una leve brisa con aromas de viejos caldos y vinos elaborados con trabajo y presteza en tiempos pasados,
desvaneciéndose y evaporándose entre la soledad y el silencio de sus calles.
Aparece la Calle Burgos para topamos con una colosal casa nobiliaria
con precioso escudo y divisa en lo alto de su gran fachada
y donde un apuesto minino no pierde la vista de nuestros pasos.
Atrapamos la esbelta estampa de la Iglesia Parroquial dedicada a San Cosme y San Damián,
ascendiendo por su espaciosa y holgada escalinata
que nos conduce hasta la hermosa portada con cinco arquivoltas y sus capiteles vegetales
refrendados por un ábside con doce canecillos románicos que miran a un pequeño crucero
y otros tantos en el muro lateral con varias cabezas humanas.Dejamos aparcado el espectacular gótico-renacentista de este fabuloso inmueble
para sumergirnos entre su encantadora arquitectura popular de adobe y piedra
y seguir respirando el suave ambiente de la humedad y del rocío de esta cálida tarde lluviosa.
Seguimos desgranando los minuciosos y pormenorizados detalles
que nos llevan hasta las inmediaciones de la Plaza Mayor
donde descubrimos y revelamos pequeños rincones dignos de admiración entre el acopio de leña para calentar las casas.
Seguimos nuestro paseo por la Calle Real, apareciendo al final un nuevo cuadro titulado
"LA CASA EN LA MOCHILA" en una perfecta fusión con los elementos de la vivienda.
En la Calle el Prado incorporamos nuevos componentes como el brocal del pozo,
además incidimos en las tonalidades y los motivos que adornan las pequeñas ventanas de las viviendas
y en las plantas que intentan acicalar las vacías y deshabitadas moradas.
La amenaza de la lluvia vuelve a caer sobre estas calles recias y calladas
que muestran con numerosas grietas y rendijas el poderoso avance de la desolación y el desamparo
que va devorando con avidez el magnífico recuerdo de los que lo habitaron.
"LA ESCUCHA DEL VALIENTE" luce con todo su esplendor y su mejor semblante
a lo largo de la Calle los Huertos, encontrando también el hueco y la cabida para que los mas pequeños de la casa puedan desarrollar su gran talento y genialidad.
La teja, la madera, la piedra y el adobe nos sigue acosando hasta el final de la callejuela
donde retumban las palabras "UN PUEBLO SIN LITERATURA ES UN PUEBLO MUDO" del vallisoletano Miguel Delibes.
"SONIDOS DE UN RÍO AUSENTE" constituye un radiante y maravilloso retrato del pasado
en el que los viejos pretiles del puente escuchaban el rumor de las aguas del arroyo,
mientras a día de hoy, nos conformamos con admirar sus robustos tajamares
y el esbelto perfil que configuran sus tres suntuosos arcos.
El itinerario nos conduce hasta la Casa Consistorial de Villangómez
desde donde percibimos el murmullo de su blasonada fuente
que regala frescura y frialdad con sus dos potentes y engalanados caños.
La Calle Lerma desencadena la alegría y seriedad en esta "POESÍA PARA MARÍA"
donde el autor seguramente revela su amor por alguna persona muy cercana e importante en su vida.
Nos acercamos hasta el relente producido por el Río Cogollos,
continuando hasta las paredes del Frontón Municipal para seguir "PINTANDO LA MÚSICA"
y caminar cantando en busca de la claridad y la luz
intentando imitar el grácil movimiento de "LOS GIRASOLES".
El mural mas espléndido y llamativo ocupa la pared mas amplia de la cancha de juego entre unas "ENSOÑACIONES"
difíciles de discernir entre un mundo onírico y la sensación de permanecer en un universo real.
La "SEÑORA DE ROJO SOBRE FONDO GRIS" nos hace recapacitar sobre las personas que tuvimos a nuestro lado
y no supimos decirles lo importantes que fueron para nosotros, buscando remedios para poder arrastrar con dignidad y pundonor el futuro mas cercano.
Unas preciosas y sugestivas tonalidades vegetales nos enarbolan hasta la Carretera de Villafuertesque localiza y converge con la obra "LOS GIRASOLES" del holandés Vicent Van Gogh,
presentando un reflexivo y acentuado pensamiento de Alberto Méndez.
La belleza, la candidez y la inocencia están representas en "LA IMPROVISADA",
abarrotando con una magestuosa tranquilidad las cercanías de la Calle Trillo
donde las traseras de un "GARAJE" se complementan con óptima perfección
a los adornos y ornamentos que lucen en el entorno de sus rúas y pasajes.
Seguimos con la diversión y el entretenimiento del juego del "RATÓN Y EL GATO"
cuyos movimientos ahuyentan y espantan un grupo de pájaros y "AVECILLAS"que permiten y proporcionan la plácida intimidad de los amantes "ROMEO Y JULIETA"
entre los tiernos y sensibles versos difundidos por Maia Juan.
Una interesante construcción de adobe imprime en continuidad el "ALL YOU NEED IS LOVE" del malogrado compositor John Lennon
y recuerda y rememora los "VIENTOS DEL PUEBLO" del poeta alicantino Miguel Hernández.
No abandonamos esta fabulosa e inverosímil pinacoteca al aire libre
sin fijarnos en los tremendos matices y la fulgurante gama de colores de la "PALOMA EN EL PALOMAR"
que se funden y fusionan en esta maravillosa sala de exposiciones.
El itinerario también penetra en el mundo de la mitología y lo sobrenatural con este "NAHUAL" que adopta las fisonomías del gato y la lechuza
y ahonda en el concepto de "IGUALDAD" muy ausente y desaparecido en la sociedad actual.
Terminamos este maravilloso "VIAJE" por la ruta de los Murales y Escritores de Villangómez
con la sensación de haber disfrutado del intenso cortejo entre el arte, el mundo rural y las nuevas tecnologías en un sólido combate frente a la despoblación.
Saludos de COMANDO SENDERISTA a tod@s caminantes. ÁLBUM DE FOTOS: VILLANGÓMEZ y también en Facebook: MURALES DE VILLANGÓMEZ
PRECIOSO
ResponderEliminarMuchas gracias por tu valoración, un saludo.
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