CAMINANDO, AL VIAJERO LE BROTAN DE SUBITO ALAS EN EL ALMA Y DESCONOCIDOS MUNDOS EN EL MIRAR

miércoles, 27 de octubre de 2021

EL NORTE DE LA COSTA BLANCA

Comenzamos un pequeño viaje por el norte de la Costa Blanca entre Alicante y Denia, un territorio con pueblos llenos de encanto, playas y calas de aguas cristalinas bañadas por la intensa y penetrante luz del Mediterráneo. Es septiembre de 2021, comenzamos.

Con la referencia del mapa, iniciamos nuestros pasos en la Plaza del Ayuntamiento de ALICANTE,
cuyo bullicio y algarabía nos proporciona un paseo por sus calles para llegar hasta la hermosa Basílica de Santa María
y subir hasta hasta el emblemático y representativo Castillo de Santa Bárbara,
una robusta y poderosa fortaleza en la que sus magníficas garitas y baluartes 
dominan la mayoría de la ciudad con sensacionales vista de su zona portuaria.
"Viento en popa a toda vela", navegamos por el Mediterráneo dejando atrás Playa de San Juan y El Campello,
alcanzando la vega del río Amadorio en la apreciada localidad de VILLAJOYOSA.
Sus Casas Colgantes desprenden un sabor marinero envuelto entre aromas de chocolate
y sus resplandecientes colores imprimen una cuidada seña de identidad entre una numerosa multitud de fachadas,
continuando esta viveza y animación hasta la playa y el Barrio Pesquero.
Su portentosa muralla y sus gigantescos torreones encierran la parte noreste de la villa
y divisan con su cercanía las finas arenas y las aguas turquesas de su maravillosa playa.
Abandonamos el ruido, el jaleo y el alboroto playero, continuando hacia el norte
y abordando la tranquilidad y el sosiego que se respira en la playa y cala El Torres,
poniendo el rumbo hacia el interior de la provincia para admirar el encanto y la belleza del Embalse de Amadorio.
Estética y elegancia a raudales desprende el magnífico ámbito que rodea el pantano,
deslumbrando con su esplendor natural entre el sublime contorno de las montañas
y sin debilitar y degradar el estupendo sabor y el buen gusto que nos depara.
Seguimos nuestra ruta por el interior en busca del pasado musulmán de GUADALEST
en la que su Castillo de San José se encuentra situado sobre una gran roca en la parte mas alta del pueblo.
La Plaza Mayor acoge el edificio Consistorial y Ayuntamiento y desde el banco y mirador
se otean las vistas y panorámicas mas espectaculares del valle entre un toque de ordenada y armoniosa belleza
llamada y denominada con razón por muchos, la Joya Esmeralda de Alicante.
Regresamos a la costa para visitar la espiritualidad y el misticismo del TEMPLO DEL ARCÁNGEL MIGUEL,
la primera iglesia ortodoxa rusa construida en España y en concreto en el pueblo de Altea
y en cuyo interior podemos disfrutar del Iconostasio o altar mayor y la impresionante cúpula decorada.
La localidad de ALTEA es conocida como la "perla blanca" de Alicante y la luz de sus playas
nos gratifican con un sentimiento profundo para disfrutar del intenso placer que nos provoca.
Ascendemos con entusiasmo por sus cordiales, limpias y blancas callejuelas
en busca de los motivos y argumentos florales que van engalanando sus casa y viviendas
hasta cruzar una de las viejas puertas de acceso del recinto amurallado.
El viajero debe subir y detenerse en las cúpulas de la Iglesia Nuestra Señora del Consuelo,
visitar el arte, el talento y la disposición con la que nos obsequia su bonito interior
y desde su balconada visualizar las soberbias panorámicas que se alcanzan.
La blancura de sus calles deslumbran y fascinan este currado y trabajado paseo
que intenta seguir el interesante rastreo para descubrir los estupendos rincones que oculta.
Nos asomamos, entre un sinfín de fragancias, al magestuoso Mirador Blanco
que nos desciende suavemente hasta los delicados y sutiles tonos de esta auténtica fantasía Mediterránea.
Tal vez nos canso el subir pero bien vale la pena esta extraordinaria caminata que culmina con las vistas del Parque Natural de la Sierra Gelada.
Un nuevo día y un amanecer soñado desde las playas de la localidad de CALPE
que nos muestra la famosa Calle Puchalt con su multitud y abundancia de banderas,
desembocando junto a los cañones que defendían las Murallas y Torreón de la Peça.
Recorremos las muestras de arte urbano representadas en sus calles y edificios,
creando ámbitos y rincones perfectamente decorados con una innegable atracción.
Sus playas y las aguas cristalinas del mar nos invitan a un refrescante y agradable remojón,
así como asistir a un soñado "spa" en el yacimiento romano de los Baños de la Reina.
Otro paseo entrañable lo podemos efectuar alrededor de la laguna de Las Salinas
en la que podremos observar la tranquilidad de sus bellos moradores, los flamencos.
La excursión finaliza entre las redes y aparejos que han sido reparados por los pescadores,
tomando seguidamente un barco del Real Club Naútico de Calpe para emprender 
la navegación por los alrededores y acantilados del PEÑÓN DE IFACH
entre las magníficas luces y sombras que nos depara este presuntuoso atardecer.
Seguimos hacia el norte, remontando la costa y recalando nuestra presencia en la Cala de la Fustera,
alcanzando unos cuantos kilómetros después la Cala Pinets con bonitas vistas de la costa
y apareciendo mas tarde en la pedregosa Cala L´Andragó con vistas a Punta Moraira.
Atacamos el Castillo de MORAIRA que actualmente es una reconstrucción, al haber sido volado por tropas inglesas en 1801.
La pequeña fortaleza domina la totalidad de la Playa de l´Ampolla y esta muy cerca 
de la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de los Desamparados que percibe y avista
el Club y Puerto de Moraira con una gran cantidad de yates y embarcaciones.
Y aunque el día esta nublado y sin sol no renunciamos a un gratificante baño en la maravillosa y reposada cala de El Portet.
Nos desplazamos hasta TEULADA para conocer el edificio de los Juzgados,
la Ermita de la Divina Pastora, que se estima que fue establecida en el siglo XVI,
la Iglesia de Santa Caterina con estilo muy sobrio en la que destaca su Torre-Campanario
y la Iglesia-Ermita de San Vicente Ferrer rodeada de palmeras.
La siguiente parada la efectuamos en la localidad de BENISA, atravesando su arquitectura urbana
con numerosos palacios y casas nobles de las que cuelgan emblemas y distintivos.
Nos cansamos y fatigamos entre el laberinto de calles y callejuelas que bajan buscando
la sombra, el cobijo y la frescura del la Plaza del Rey Jaime I enmarcada y situada
junto a la altiva y orgullosa Iglesia de la Purísima Concepción y conocida también como la Catedral de la Marina.
Los antigüos y vetustos Molinos de la Plana nos señalan el camino para alcanzar
el faro situado en lo mas alto del espléndido y opulento promontorio del Cabo de San Antonio
con panorámicas envidiables de las sierras que rodean el pueblo y villa de Jávea,
además del estupendo mirador que descubre las suaves tierras del Cap Prim,
y las playas que empiezan junto a la zona portuaria y recorren este bello municipio alicantino.
La pequeña población marinera de JÁVEA nos muestra con belleza sus viviendas mas pintorescas
y en su centro histórico podemos admirar la Iglesia-Fortaleza de San Bartolomé
que junto al Ayuntamiento y Casa Consistorial forman un apasionado conjunto,
mostrando su lado mas hermoso y radiante, reforzándolo con el mejor de los gustos.
La Calle Estret nos sorprende con una abundante y cuidada ornamentación vegetal
muy cerca del silencioso y reservado convento de la monjas Agustinas Descalzas.
La colosal mole rocosa del Cabo de San Antonio preside el desfile de un paraíso de espectaculares playas y calas,
avanzando por el paseo marítimo hasta la Playa del Primer Muntanyar o Benissero entre una selección de gravas y mucha roca.
El estrecho Canal de la Fontana aprovecha sus riberas para asentar un alargado puerto deportivo que culminará en la Playa del Arenal, la única playa de arena de Jávea.
Un entorno natural de ensueño y la nitidez total de las aguas del mar han llevado a la fama a esta joya denominada Cala Barraca o del Portixol
en la que una simple puerta pintada pintada en azul ha sido capaz de cautivar a miles y miles de turistas
entre un puñado de fotogénicas casas de pescadores que miran hacia el Mediterráneo.
Abandonamos el brillo de esta imagen repetida hasta la saciedad en la mayoría de redes sociales,
disfrutando desde las alturas de esta obra natural entre Cap Prim y Cap Negre.
Nuestro último destino es la localidad de DENIA en la que los resaltes montañosos del Montgó despuntan sobre el Puerto de la localidad.
Desde el Barrio de Pescadores comenzamos un pequeño recorrido que nos llevará
hasta la enigmática puerta de acceso de esta enorme fortaleza que es el Castillo de Denia.
Atrás dejamos la época islámica entre los siglos X y XI que fueron los orígenes de este hermoso baluarte
para continuar el itinerario hasta la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de La Asunción,
un templo cristiano construido entre las décadas de 1720 a 1750 en el lugar que ocupó la antigüa Ermita de San Roque.
En la misma Plaza de la Constitución aparece también el edificio del Ayuntamiento
y desde la Plaza del Consell podremos sumergirnos por el Túnel del Castillo
para comunicar el paseo con la Ronda de las Murallas y disfrutar de los lienzos y contrafuertes del castillo.
Playas, calas, montañas, parajes naturales sorprendentes, embalses, castillos y pueblos que merecen mucho la pena descubrir. Todo esto y mas aguarda al visitante al norte de la Costa Blanca.
Saludos de COMANDO SENDERISTA a tod@s caminantes. Hasta una próxima aventura.

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